La zona sur del Parque Nacional Kruger es reconocida por la gran cantidad de avistajes de los famosos 5 grandes. Un puñado de lodges ostenta el privilegio de emplazarse en este territorio salvaje, con zonas concesionadas para la realización de safaris exclusivos dentro mismo del Parque Nacional.

El renombre de Kruger le vale una gran cantidad de visitantes que son atraídos por la magnífica vida salvaje. Muchos de ellos, principalmente visitantes locales, eligen adentrarse en el parque en vheículos particulares, lo que suele generar algunos “embotellamientos” alrededor de los animales cuando aparecen a la vera de las rutas. Si la idea es por el contrario, un encuentro con la naturaleza y ver la menor cantidad de gente posible, la estadía en un Safari Lodge es siempre la opción más recomendada.

Cuando hacemos referencia a los safaris, la calidad de los mismos es sin duda más importante que la cantidad, aunque para ser realistas, a mayor número de safaris, mayor es la probabilidad de avistamientos interesantes. A decir verdad, nunca se sabe a ciencia cierta lo que podremos presenciar.

Una estadía de dos o tres noches en un lodge es por lo general lo más recomendable. Esto proporcionará unas 4 salidas de safari (cada paseo de aproximadamente 3 horas), lo que dará buenas chances de ver a algunos de los 5 grandes. Los más afortunados podrán ver a todos ellos!

En el sector sur de Kruger hemos visitado recientemente a Lukimbi Safari Lodge, que es una excelente alternativa para una estadía confortable dentro del parque. Con instalaciones amplias y confortables y un estilo típicamente africano, Lukimbi se posiciona como una opción tentadora para quienes gustan del confort y un buen servicio. Sus 16 habitaciones (classic y premier) se disponen en torno a un abrevadero donde es frecuente la presencia de animales. Todas ellas son espaciosas y con amplias zonas comunes.

Lukimbi se caracteriza por amplias áreas comunes bien decoradas, y espacios en constante comunión con el entorno. Los platos ofrecidos son variados y abundantes por las noches, mientras que durante el calor del día las comidas ofrecidas son más ligeras, acorde con las altas temperaturas. Un día típico en el lodge comienza con una llamada para despertar temprano en la mañana, para iniciar un safari conducido por alguno de los guías especializados. Estos paseos en vehículos abiertos pueden durar en promedio unas tres horas, retornando al lodge para un abundante desayuno en la bien posicionada terraza. Los huéspedes tendrán luego tiempo libre para el relax, un almuerzo ligero, y una nueva salida de safari por la tarde.

Una estadía en este lodge asegura un encuentro cercano con la naturaleza, sin dudas una experiencia única que quedará por siempre en la memoria de los viajeros.